#yomequedoencasa este fue en hastag con el que comenzó un proceso nuevo que lo cambiaría todo. Y es que la Covidien-19 nos obligó a encerrarnos en casa suficiente tiempo como para poder darnos cuenta de las virtudes pero también de todas las carencias y defectos que tiene nuestra casa. Y es que pasamos de utilizar la casa para poco más que para dormir a pasar las 24 horas del día los 7 días de la semana.
Los hogares se tuvieron que adaptarse a la nueva situación, de repente los espacios se tuvieron que transformar, lo que era el comedor y la sala de estar también se convertía en gimnasio o espacio de trabajo, el pasillo en salas de juego y pistas de baile, las habitaciones en escenarios para retransmitir «stories» o grabar en ellos «tik-toks» … y así pues, cada uno con sus recursos y sus limitaciones re-configuraba los espacios para convertirlos en lugares multi-actividad.
El confinamiento nos hizo dar cuenta de la importancia que tiene la configuración de nuestra casa y aspectos que seguramente no dábamos bastante importancia pasaron a ser fundamentales. Quien no le llegaba la luz del sol envidiaba aquellos que tenían, los balcones pasaban a ser todo un lujo y los que tenían un jardín eran todo unos afortunados.
Y es que aparte de cambiar la manera de relacionarnos con nuestro país, también cambió nuestra vida social, dejamos entrar dentro de casa más gente que nunca (por videoconferencias y videollamadas), no sólo a nuestra familia y amigos , sino que también lo hacían nuestros compañeros de trabajo, nuestro jefe, la profesora de yoga, todos los compañeros de clase del hijo, el profesor de ángulos .. todos descubrían como eran las cortinas de casa, los libros que teníamos en los estantes y como de transitado era nuestro comedor.
Esperamos no tener que volver a pasar otro confinamiento y no tener que volver a encerrarnos en casa otra vez pero todas estas circunstancias que hemos vivido y estamos viviendo han supuesto un cambio de paradigma. En la nueva normalidad, no sólo han cambiado nuestros hábitos y la forma de trabajar, sino que también ha cambiado la forma de ver nuestra casa, ahora nos replanteamos, con unos nuevos criterios, como debe ser y como la podemos modificar para que pueda ser más agradable, confortable y práctica.
La pandemia ha sido una aceleradora de muchos cambios que ya iban sucediendo pero a otra velocidad. La teleformación, el teletrabajo, el consumo online … y tantos otros sectores q se han visto obligados adaptarse a las nuevas necesidades han hecho una oportunidad para mejorar la calidad de vida de las personas. El diseño interior, evidentemente, no está ausentes de toda esta situación, de hecho, ahora más que nunca es donde se entiende y se valora la importancia de nuestra profesión. Disponer de una correcta distribución, una buena iluminación y ventilación, la elección adecuada de los materiales y las texturas, tener sensación de amplitud (que no quiere decir disponer de muchos m2) … y muchos otros aspectos que ya hace tiempo que estaban sobre la mesa, ahora cogen mes relevancia que nunca. Y es que ahora, es un buen momento para detenernos, analizar, reflexionar y repensar el diseño de nuestras viviendas con una visión de futuro, priorizando el día a día y teniendo en cuenta todo lo intangible que nos genera bienestar para poder mejorar la calidad de vida de sus habitantes
Es por todo ello, que si estás pensando en comprarte una casa o reformar una vivienda deberías tener en cuenta una serie de aspectos y criterios que podrán hacer de casa tu un lugar más preparado y adaptado a la nueva época en la que estamos viviendo
Espacios más flexibles y versátiles:
Los hogares tradicionales, compartimentadas con paredes y divisiones interiores, con estancias asignadas por una sola función pasarán a mejor vida. Ya se ha visto que necesitamos espacios más polivalentes, diáfanos y abiertos, capaces de aglutinar diferentes actividades y preparados para llevar a cabo diferentes acciones. Debemos apostar por hogares flexibles y versátiles, donde todos los que conviven encuentren su lugar, donde sea compatible la vida familiar, el descanso individual y el espacio de estudio o de trabajo.
Conexión con el exterior (espacios «in & out»):
La imagen de gente en el balcón tomando el sol, haciendo el vermut, tocando un instrumento, haciendo ejercicio, hablando con los vecinos o aplaudiendo a las 20: 00h formará parte del recuerdo que nos dejó el confinamiento, y es que parte de la vida confinada pasó en los balcones, las terrazas y en los jardines de las casas. Durante el confinamiento nos dimos cuenta del privilegio de disponer de estos espacios que además de permitirnos la socialización con el vecindario nos conectan con el exterior y nos proporcionan sensación de libertad y desconexión. Así pues, la tendencia de cerrar terrazas para ganar m2 de vivienda se ha acabado. Ahora es momento de abrir los espacios hacia fuera, de prestar atención en la relación entre el interior-exterior y de potenciar esta transición. Convertir los exteriores como una prolongación del interior y llevar la vida de dentro hacia fuera será una de las tendencias más relevantes en la evolución de las viviendas.
Unión de cocina y comedor:
Tan una como otra estancia conforman el centro neurálgico de nuestros hogares ya que es donde pasamos más horas despiertos y donde se produce la comunicación entre unos y otros. Romper con la barrera física y visual que separa estos 2 espacios es clave, sobre todo en el caso de viviendas pequeñas, ya que además de compartir la luz y de conseguir una mayor sensación de amplitud, haremos que la persona que está cocinando no quede apartada de la otra parte de la vida familiar y también se pueda socializar mientras prepara la comida.
No por ello significa, por fuerza, que la cocina debe quedar totalmente abierta al comedor, ni que debe estar totalmente integrada, podemos colocar una puerta corredera o aberturas de vidrio para poder separar en un determinado momento o diferenciar -la del ambiente del comedor con la ayuda de diferentes materiales y acabados.
Contacto con la naturaleza:
Quizás es una de las cosas que más encontramos a faltar en el confinamiento, y es que está demostrado que el contacto con la naturaleza es vital tanto para niños como para adultos. Influye en el estado de ánimo y en la salud mental de las personas (estimula la mente y calma el estrés). Así pues las plantas son grandes aliadas a la hora de diseñar espacios interiores ya que contribuyen a hacerlos más naturales y saludables. Si incluimos vegetación dentro de los hogares nos permitirá generar atmósferas más agradables que favorecerán el descanso pero también la concentración. Además, nos aportarán una serie de beneficios muy importantes: mejorarán la acústica, purificarán el aire, regularán la temperatura …
Mobiliario ligero:
Apartar la mesa y mover el sofá para poder convertir el comedor en un gimnasio se convirtió en una rutina bastante frecuente en muchos hogares en la época del confinamiento. Nos hemos dado cuenta de que necesitamos espacios más flexibles y versátiles, pero también tendrá que ser el mobiliario del que disponemos. Muebles sencillos, de estilo neutro, ligeros, multifuncionales y poder ser modulares nos ayudarán a generar espacio aún más flexibles y dinámicos. También nos permitirán realizar cambios más frecuentemente en la redistribución del mobiliario, que siempre ayuda a romper monotonías.
Adaptar espacios de trabajo:
Durante la pandemia un gran porcentaje de personas tuvieron que improvisar, como y donde pudieron, un espacio para trabajar dentro de casa. Pero es que el teletrabajo ha venido para quedarse, es una tendencia a la que cada vez más empresas irán implementado. Así pues, a partir de ahora, es indispensable proyectar espacios de trabajo a las viviendas, tenemos que poder disponer de un lugar suficientemente preparado donde podamos trabajar con las condiciones que necesitamos, que nos permita estar cómodos y concentrados para afrontar una jornada laboral.
La tecnología, cada vez más presente:
Ya hace tiempo que la tecnología está revolucionando la manera de vivir, cada vez está más presente en nuestras vidas y va evolucionando en todos los sectores. En el mundo del interiorismo también hay que apostar por la tecnología y proporcionar y dotar los hogares de las ventajas que la tecnología nos ofrece. Ya hace años que podemos ver persianas eléctricas, puertas automáticas, enchufes usb, sistemas de iluminación inteligentes, grifos que funcionan con sensores… y muchos otros sistemas innovadores que van apareciendo. Atentos y abiertos a los nuevos avances ya que la tecnología es el futuro y la domótica acabará instaurarán a todos los hogares.
Eliminar todo lo que no es necesario
Ja fa temps que la tecnologia esta revolucionant la manera de viure, cada cop és més present a les nostres vides i va evolucionant en tots els sectors. En el mon del interiorisme també cal apostar per la tecnologia i proporcionar i dotar les llars dels avantatges que la tecnologia ens ofereix. Ja fa anys que podem veure persianes elèctriques, portes automàtiques, endolls usb, sistemes d’il·luminació intel·ligents, aixetes que funcionen amb sensors… i molts altres sistemes innovadors que van apareixent. Cal estar atents i oberts als nous avenços ja que la tecnologia és el futur i la domòtica s’acabarà instauraran a totes les llars.
Todos estos aspectos son algunas de las recomendaciones de carácter general, pero hay que tener claro que cada casa es un mundo y cada uno tiene sus gustos y sus propias necesidades. No existe una familia igual que otras y por eso pienso que tampoco debería haber 2 casas iguales. Lo que puede ser muy funcional, agradable o práctico para una persona puede ser todo lo contrario por otra. Es por ello, que lo mejor es que te dejes aconsejar por un profesional que te pueda indicar cuál es la mejor opción para adaptar la casa a tus necesidades.